miércoles, 6 de mayo de 2009

Desde España ¿qué impresión?

Uno de mis mejores amigos siempre que puede me escribe desde España.
La visión que tienen desde "Estrangia" de México es que los que sobrevivimos a la influenza nos hemos transformado en muertos vivientes. Por eso no hay que meter en saco roto el aislamiento que muchos países nos están aplicando. Cuba, no habrá ya matrimonios express entre mexicanos y cubanos, ni nuevos "actores"; Argentina, pues los inmigrantes argentinos en Condesa se quedaron sin chamba y sin boleto de regreso a su país. China, habría que dejar de comprar todo lo que nos venden y les aseguro que la economía mexicana se levantaría; claro, hagamos las cosas bien y a los mismos precios que ellos.

Aquí les dejo la carta.

Saludos.

Ivo Cizaña.

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Hola:

Perdón que no me haya hecho presente en los últimos días. Aquí en España se creó un ambiente muy exagerado en relación con la influenza A, mucho más por el pánico que han creado la prensa española y mexicana que por cuestiones de la vida real.

Si uno leía la prensa española en estas dos últimas semanas, tenía la impresión de que los mexicanos estaban cayendo muertos por la calle en el D.F. y que la gente que aún estaba viva caminaba por la acera esquivando a los fallecidos, los perros se alimentaban de los cadáveres entre la puerqueza y la basura y el ejército rondaba las calles en tanques y con trajes anti-contaminantes... igualito que en un capítulo de "Ensayo sobre la Ceguera".

Naturalmente, todos los editorialistas y comentaristas de televisión españoles se ensañaron señalando que era el nuestro era un país lleno de corruptos, que el narcotráfico, que el sistema de salud era una porquería, que la ignorancia de la gente, que éramos el patio trasero de Estados Unidos, etc. etc. etc. etc. Pura belleza y amor a México desde la madrastra patria.

Incluso los colaboradores mexicanos de períodicos españoles como Juan Villoro se mostraron amabilísimos criticando fieramente a su propio país. En fin, el alarmismo y la mala onda en su expresión máxima en una situación bastante seria en lo que se imponía era una cabeza fría y una actitud equilibrada.

Aparentemente las cosas ya están amainando. El próximo terremoto en Idiotistán o una masacre en una escuela en Idaho nos sacará seguramente definitivamente de las primeras planas.

Yo espero que todos ustedes estén bien de salud y que esta situación no les haya afectado demasiado en su vida diaria o a la de su familia en México.

Muchos saludos

Javier

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